Reseña histórica
Hacia los años 60, en el sector rural, sur oriente de Talca, en medio de lo que fueran terrenos agrícolas, huertos y hortalizas, es fundado un conjunto habitacional, cuyos gestores son esforzados trabajadores agrícolas, jornaleros y empleados de una cercana fábrica cervecera. Muchas familias, con numerosos hijos, conforman una población habitacional de autoconstrucción, en terrenos de la que se denomina Cooperativa Río Claro. Esta población que se erige, es la Población Aurora de Chile.
La numerosa población infantil, de aquel entonces, demanda educación, pero no hay escuelas cercanas. Surge entonces la necesidad de crear una. Para ello, los pobladores reservan con ese fin, un lote ubicado en medio de la población, terreno que es cedido por las cooperativas de autoconstrucción Fátima y Río Claro. Lugar en que se construye dos salas de madera con apoyo de las autoridades educacionales, pero con el esfuerzo y trabajo de los mismos pobladores y sus hijos, quienes dedican sábados y domingo a preparar el terreno para construir sus viviendas, una capilla, un policlínico y su escuela.
El inicio de las clases en esta escuela, es programada para marzo del año 63. Termina el verano y los estudiantes de Talca se preparan para un nuevo año escolar, pero el otoño se presenta muy severo. Lluvias torrenciales de 15 días inundan gran parte de la ciudad. Llegar a las aulas, se hace difícil. Por lo que se suspenden las clases por casi todo Abril y los establecimientos educacionales se convierten en albergue para los damnificados. Por esta razón, nuestra escuela, abre sus puertas por primera vez el 22 de mayo de 1963 con el nombre de Escuela Rural Mixta de segunda clase, N° 88 de Talca, siendo su primera directora la señora Violeta Bastías Laumonte.
Esta pequeña escuela inicia sus actividades pedagógicas en dos salas de madera y piso de tierra, con dos antiguos pizarrones, 25 bancos bipersonales traídos de la escuela N° 33 de Maule. Más tarde, los mismos dirigentes poblacionales harán gestiones para conseguir su primera campana.
Mientras se tramita el decreto respectivo para el funcionamiento, se constituye como anexo de la Escuela Rural El Tabaco. Siendo los primeros profesores de éste, los Sres. Carlos Concha Poblete, Leonardo Villarroel y la Srta. Carmen Troncoso Rojas, provenientes de la Escuela El Tabaco.
Dos modestas salas, albergan a 88 alumnos, como lo acredita el libro de registro de ese año. Alumnos y alumnas que son atendidos por los profesores antes mencionados. Todos ellos son beneficiarios de desayunos y 40, con almuerzo, el que es preparado por apoderados de casas vecinas quienes con un gran sentido solidario y cooperador se turnan para prestar esta ayuda.
El almuerzo es servido en una de estas dos salas de clases. No es fácil educar en estas condiciones: carencia de agua y baños inadecuados, un patio polvoriento, caluroso en verano y un lodazal muy frío en invierno. Los profesores de entonces, junto a padres y apoderados no cejan en su objetivo: “Mejorar y hacer crecer su escuela”.
Para ello organizan la campaña del ladrillo y otras actividades de beneficio, más el trabajo esforzado y voluntario de los días sábados, logran importantes avances. De allí nace el sentido de pertenencia y cariño que los hijos de este barrio, le tienen a su escuela.
Este incipiente establecimiento educacional, proyecta la construcción paulatina de 8 nuevas salas que se espera, acoja a 300 nuevos alumnos, como matrícula segura para marzo de 1964. Además se construirá una sala para profesores y una oficina para la directora, ya que para realizar ésta, sus funciones, ocupa una oficina cedida por el gerente de la cooperativa Fátima, oficina que también, es parte del policlínico local.
Para Abril de 1964 la escuela Rural N° 88, cuenta con una matrícula efectiva de 288 alumnos distribuidos en 6 cursos de 1° a 6° año. Esto es gracias a que la cooperativa ha logrado un beneficio del estado para construir nuevas salas haciendo sus asociados un aporte de E° 15.000 (dinero de la época). Estas salas siguen el modelo arquitectónico de la Reforma Educacional del presidente Frei Montalva. Reforma que construye gran número de escuelas en el país y en este proceso, ésta se ve beneficiada con la construcción de pabellones que hasta hoy, aún se utilizan y conservan en las alas norte y sur, entre nuevas construcciones de modernas arquitecturas.
Desde 1973 a 1989 asume el cargo de director en esta escuela el señor Francisco Guerra Toro.
En 1981, con el traspaso de las escuelas públicas al sector municipal, ésta, la Escuela Rural N° 88, pasa a llamarse Escuela E – 157 de Talca.
Desde 1993 a 1995 la dirige el señor Querubín Navarrete, a quien le sucede el señor Enrique Alcaino Ocaranza durante el periodo de 1995 a 1996.
Posteriormente asume el señor Carlos Concha, durante cuya administración la escuela alcanza un importante crecimiento junto a los profesores que le acompañan. Construyéndose en este periodo, el gimnasio techado.
Un nuevo decreto de 1990 – 1991, dispone que todas las escuelas públicas del país deben agregar a su número de identificación, el nombre de un destacado personaje de nuestra historia o lugares significativos de su entorno. Por consiguiente, la Escuela E – 157 pasa a llamarse desde entonces, Escuela Aurora de Chile, tomando el nombre del sector en que se encuentra inserta.
Desde 1997 hasta el año 2013 tuvo la misión de hacer crecer y modernizar nuestra escuela, el señor Héctor Riquelme. Durante cuya administración y dirección, la escuela alcanzó importantes logros como: la Excelencia Académica, La ampliación y modernización de nuevos pabellones con acogedoras aulas dotadas de modernas tecnologías, laboratorio de computación, camarines equipados, para el bienestar de los alumnos; amplia, cómoda y acogedora sala de profesores, un patio pavimentado, Bibliotecas CRA y PME.
Desde Mayo de 2013 asume como director el señor Osvaldo Rojas Salgado, cuyas políticas administrativas, lograron el aumento de un 30% de la matrícula y por ende el crecimiento de la dotación docente. Siendo lo más destacado de su gestión, el Proyecto de Inclusión e integración. Fortaleciendo la presencia en las aulas, de un selecto equipo PIE. Transformando la escuela Aurora de Chile, en una reconocida institución inclusiva a nivel comunal.
Hoy, nuestra escuela, al cumplir el sexagésimo segundo aniversario, se encuentra bajo la administración y dirección de la prestigiada educadora y directora, Sra. María Verónica Aguilera García, junto a un selecto equipo directivo, que le acompaña en esta gran labor educativa y administrativa.
En esta nueva gestión, nuestra escuela ha tenido un notable crecimiento. Al día de hoy cuenta con una matrícula de 651 alumnos y alumnas, desde el nivel prebásico a 8°año, un plantel de 55 profesores y 48 asistentes de aula, más profesionales de apoyo a la labor de integración: fonoaudiólogas, kinesiólogo, sicólogas, asistente social, orientadora, etc.
Nuestra escuela Aurora de Chile ha logrado sobresalir en el concierto de escuelas municipales de la ciudad de Talca, al destacarse en actividades extraprogramáticas y obteniendo excelentes resultados en las últimas evaluaciones SIMCE. Indicadores del esfuerzo y cariño con el que todos los profesionales entregamos afecto y una educación de calidad.
De esta manera, nos encuentra Mayo de 2025, celebrando los 62 años del inicio de esta escuela que es hoy una escuela grande, moderna y bonita, con muchos niños y niñas de prebásica y dos cursos por nivel de primero a octavo año, que dan vida a esta escuela, la que ha estado al servicio educativo y social de la comunidad, para cuyo fin, fue creada y que a través del tiempo ha ido creciendo y ganando prestigio y reconocimiento en el concierto educativo de nuestra ciudad.
He aquí su historia, sucinta pero significativa. Porque recordar nuestros orígenes es un encuentro con el pasado, para admirar el trabajo de nuestros predecesores, reflexionar en el presente, para mirar con claridad y seguridad el futuro.
Patricio Antonio Cancino Durán – Profesor de Lenguaje y Comunicación
Fuentes de Consulta:
Revista Escolar Aurora de Chile (Año2010)
Registro Escolar Esc. 88 Año 1963
Recuerdos y vivencias personales de Sr. Juan Carlos Valdés Vásquez (Vecino, Exalumno y apoderado.)